La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha presidido este domingo un homenaje a las víctimas del COVID-19 y, especialmente, a las que fallecieron y posteriormente no han sido reclamadas por sus familiares.
Junto con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, la presidenta madrileña ha descubierto una placa en la fachada de la Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional, y ha depositado una corona de laurel. Su texto reza “El pueblo de Madrid en recuerdo a las víctimas del COVID-19 y en especial a aquellas que fallecieron en soledad”.
El pasado mes de julio, el Gobierno regional se encargó de la inhumación de 59 personas fallecidas que se encontraban en el Instituto de Medicina Legal, uno de los depósitos provisiones que puso en marcha el Ejecutivo madrileño durante la primera ola de pandemia.
Traslado de los fallecidos
El Instituto de Medicina Legal fue una de las tres infraestructuras provisionales que, durante la pandemia del COVID-19, la Comunidad de Madrid puso a disposición de la autoridad sanitaria para trasladar víctimas de la enfermedad. En total, se trasladaron 1.897 cuerpos. Al Palacio de Hielo de Madrid llegaron 1.146 fallecidos, 162 fueron acogidos en el Palacio de Hielo de Majadahonda, y el resto, es decir, 589, fueron enviados al Instituto de Medicina Legal.